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Texto: Alejandra Muñoz Duarte
Si eres de los que huyen de los convencionalismos, de la simetría y de “lo de siempre”, entonces seguro que odias las típicas mesitas de noche de dos cajones y formas sosas. ¡Tranquilo! Un taburete de diseño puede ser tu mesita de noche desde ya.
Existen mesitas de noche para tu dormitorio que lo parecen pero que no lo son. Hacen su función, son un elemento más de decoración y sirven de apoyo para tu libro favorito o el despertador, pero cuentan con un diseño que se aleja de las clásicas mesillas. Y si lo que te preocupa es que en tu casa los espacios pequeños abundan y una mesita de noche hace que la habitación se vea demasiado cargada, no temas, coloca una flotante o usa una cesta para guardar lo imprescindible.
Contenedores, baldas, carritos, troncos de madera, taburetes… solo hay que dejar volar un poco la imaginación para ver mesitas de noche donde nadie las ve. Son la pareja ideal para tu cama. Y si te gustan varias opciones, ¡no sufras! Coloca modelos diferentes en cada lado de la cama, no tienen por qué ser iguales y, además, seguro que le aportan un toque diferente a tu habitación.
Las sillas como mesitas de noche pueden ser ideales si tienes una de esas casas con espacios pequeños. ¿Qué pasa si vienen invitados? Pues las sillas pueden convertirse en el atrezzo de tu comedor.
Los taburetes de fibras y materiales naturales son perfectos para decorar cualquier estancia, lo mejor es que tienen mucha utilidad. Úsalos también como mesita, tienen una base amplia para dejar cualquier cosa y, sobre todo, son bajitos, así que seguro que quedan bien con tu cama.
Las mesitas de tronco pueden darle a tu habitación ese estilo rústico que buscas. Coloca tantas como quieras, y si ves que con una no tienes suficiente, incluye dos de diferentes estampados o colores.
En lo que a decoración se refiere, las escaleras están de moda. Existen muchas que incluyen cajones para guardar lo que te apetezca y, otras, las escaleras “de toda la vida” en las que puedes dejar volar tu imaginación incluyendo cestas o bolsas de tela para poder almacenar tus calcetines o libros.
Para las habitaciones infatiles son ideales las que incluyen cestas, ya que son una manera divertida de decorar el cuarto y, sobre todo, mantenerlo organizado sin demasiados muebles.
Estantes cúbicos, huecos, instalados de manera aislada o varios en columna, según tus necesidades de almacén son una buena idea para abrirse al espacio. Una de las mejores formas de colocarlos es con un aplique de pared.
Con ruedas, la mesita de noche será muy práctica. ¿Qué te parece el ya mítico carrito Råskog de Ikea? Incorpora tres soportes para guardar desde mantas a cojines, pasando por libros y plantas. ¿Lo mejor? Es que tiene un toque de diseño ideal para cualquier dormitorio al que le vaya bien el blanco.
Las baldas o estantes minimalistas son idóneas. Si las eliges de metal, consiguen reducir el grosor. Hay diseños que incorporan soportes para libros o revistas, aunque en su mayoría no suelen ser mesitas que tengan como objetivo el almacenamiento. Si lo prefieres, puedes colocar debajo una cesta que para guardar lo que sea.
El modelo Componibili, de Kartel, se adapta en altura a cualquier cama, según apiles uno, dos o tres módulos contenedores. Es perfecta si te gusta el estilo moderno o si lo que buscar es que todo lo que dejas en tu mesita no quede al descubierto.
Las cestas de mimbre son un buen aliado para guardar mantas, cojines, incluso juguetes de los más pequeños de la casa. Si no eres de los que usan la mesita de noche, puedes colocar una cesta para mantener recogidos los cojines de la habitación ¡y listo!
Mini estanterías que hacen de mesilla de noche. Lo bueno: ganas espacio de almacén si eres de los que reúnen varios libros junto a la cama.
Una mesita auxiliar es el típico elemento que todos tenemos en casa, ¿Te has planteado usarla como mesita de noche? Puedes colocar varias cosas y suelen contar con diseños más originales que las mesitas de noche convencionales.
Los puf sirven tanto para dejar tu libro favorito después de un rato de lectura, como para descansar los pies después de un día duro de trabajo. Son multifuncionales y, sobre todo, muy estilosos. Ahora los encontramos fabricados con esas fibras naturales que le dan un toque boho a cualquier estancia.
Si eres de los que colecciona revistas que nunca vuelve a ojear, no las tires, aprovéchalas para convertirlas en tu nueva mesita. Suelen darle un toque desenfadado a la habitación y, también, algo de vida.
Calcetines, pañuelos, complementos… tienes mucho que guardar si escoges un mueble con múltiples cajones. Quizás es la opción ideal para quienes no tienen demasiado espacio en su cuarto y necesitan aprovechar el espacio de almacenaje que les ofrece cualquier rincón.
Los bancos son geniales si buscas darle un toque pintoresco a tu habitación. Además, también sirven como tocador o como mesa para trabajar, así que son tan funcionales como si utilizaras una mesa de escritorio como mesita, pero con más glamour.
Las mesitas de noche suelen ser uno de los muebles más complicados de elegir para una habitación, no sabemos si las necesitamos con muchos cajones, con pocos, con ninguno. O si lo que preferimos es que simplemente sirvan de decoración. Son una pareja fiel a la cama, al armario y a todos los elementos que completan el cuarto, pero sobre todo, deben ser originales, al final y al cabo, después de la cama, son lo primero en que nos fijamos.
Alejandra Muñoz es licenciada en Periodismo y también estudió Decoración e Interiorismo. Su pasión es todo lo que tenga que ver con la comunicación y la decoración. Además de pasarse el día escribiendo, se dedica también a la decoración de eventos e imagen corporativa, así como a impartir talleres sobre decoración, comunicación, educación y cocina, mundos a los que está "enganchada". En redes, como loca por la fotografía, la puedes encontrar en @alterandme
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